Sobre la tormenta Hermine en Canarias: intenso episodio lluvioso a finales de septiembre de 2022, por Luis Manuel Santana Pérez
ÍNDICE
- SUMARIO
- INTRODUCCIÓN
- ANTECEDENTES
- CRONOLOGÍA DE POSICIONAMIENTOS DE DEPRESIÓN TROPICAL HERMINE
- DISTRIBUCIÓN DE LAS PRECIPITACIONES DIARIAS EN TENERIFE. ISOYETAS EL 25 DE SEPTIEMBRE Y DURANTE EL EPISODIO LLUVIOSO 24 AL 27 DE SEPTIEMBRE
- GALERÍA FOTOGRÁFICA DURANTE EL DESPLAZAMIENTO DE LA DEPRESIÓN
- BIBLIOGRAFÍA
- ANEXOS
– Pluviometría durante el episodio lluvioso tras el desplazamiento de la borrasca Hermine.
– Rosas de viento en lugares destacados de Tenerife, Fuerteventura y Lanzarote que
muestran el cambio de dirección del viento tras el desplazamiento de la borrasca tropical sobre
el Archipiélago.
SUMARIO
Los canarios siempre mirando al cielo, siempre esperando lluvias que sacien la sed de los campos. En esta ocasión, una borrasca tropical de origen atípico, costa occidental africana, más al sur, se aproximó levemente a las aguas canarias -a comienzo de otoño- y en su desplazamiento regó todas las islas con copiosas precipitaciones, extraordinarias en esta época del año. Chubascos y lloviznas abundantes durante varios días, acompañadas de vientos débiles de componente este-sureste, marcaron un hito en las observaciones pluviométricas registradas en los archivos meteorológicos.
El presente trabajo recoge datos diarios durante el episodio lluvioso en todas las estaciones automáticas de las islas, mapas de isoyetas en Tenerife, así como explicaciones barométricas, anemométricas, imágenes satelitales diarias e imágenes de radar en los instantes de mayor actividad borrascosa.
INTRODUCCIÓN
La tormenta tropical Hermine, que se desplazó lentamente sin graves consecuencias por costas y medianías del Archipiélago, a finales de septiembre de 2022, ocasionó importantes precipitaciones, muy ansiadas por los agricultores. Lluvias que regaron los sedientos campos tras prolongada sequía y que llenó embalses, balsas o gavias. En este trabajo, analizamos minuciosamente la información de la amplia red de estaciones meteorológicas automáticas de Canarias, utilizando medios modernos, más allá de registros digitales, caso de mapas barométricos, imágenes de satélite e incluso de radar meteorológico, para seguir el desplazamiento de dicha tormenta tropical.
En esta monografía (vigésima tercera expuesta en la sección de publicaciones meteorológicas del MUNA) destacamos este curioso episodio lluvioso, acaecido a comienzo del otoño en el Archipiélago. Señalemos que las copiosas lluvias asociadas a la depresión Hermine fue un fenómeno fortuito, ya descrito hace años por el maestro Font Tullot (1951), y parece que no pudiera estar relacionado de los cambios climáticos, dado que se dieron similares situaciones anómalas en el pasado. Además, en este artículo, insertamos ciertos conceptos meteorológicos e hidrológicos muy utilizados en los medios de comunicación actuales, resaltando que el resultado de esta borrasca ha tenido repercusiones, desde el punto de vista social, en extensas superficies plenas de exultante de vegetación.
Si hacemos algo de historia, recordemos que la insólita tormenta se formó cerca de la costa de Senegal, desplazándose paulatinamente de sur a norte desde dichas zonas tropicales. Tras varios días sobre el mar, realiza un giro hacia el oeste en zonas subtropicales, situándose siempre su núcleo al suroeste de Canarias. Con el paso de los días, la tormenta -ya muy debilitada y convertida en borrasca tropical- inyecta humedad atmosférica elevada y precipitaciones notables en zonas del este a suroeste de Canarias, durante el sábado y domingo, 24 y 25 de septiembre, por una vaguada extratropical. La masa nubosa que se desplazó lentamente sobre el Archipiélago de este a oeste era, en realidad, el borde septentrional de la borrasca oceánica, extensa, de forma oval simétrica, cuyo movimiento superficial siguió la circulación antihoraria (contraria a las agujas del reloj). La mayor pluviosidad estuvo vinculada con vientos débiles a moderados que soplaron en dirección este acompañadas de movimientos convectivos escasos.
Precisamente, resultó paradójico que, durante los días más lluviosos, la intensidad del viento disminuyó en relación a los días precedentes y posteriores al episodio lluvioso.
Las observaciones facilitadas por estaciones meteorológicas son numerosas y es muy difícil asimilar sus valores estadísticos de centralización. La presentación cartográfica de precipitaciones diarias es un procedimiento didáctico apropiado para visualizar los contrastes numéricos. Cada mapa esquemático va acompañado de una escala de colores que identifica los intervalos pluviométricos, recursos que facilitan las distintas pluviosidades en las regiones tinerfeñas tras el desplazamiento de la depresión Hermine.
Asimismo, el trabajo presenta dos mapas de isoyetas de Tenerife, mapas barométricos, tabla de precipitaciones diarias en varias islas, es decir, una meticulosa labor de recogida de datos durante el intenso episodio lluvioso. También, rosas de viento en varios lugares insulares, trazados con la información facilitada por estaciones anemométricas de las redes de los Cabildos de Lanzarote y Tenerife, Agencia Estatal de Meteorología, Investigaciones Agrarias (ICIA), Cartográfica de Canarias (GRACAN), y estaciones privadas del Puerto del Rosario (Fuerteventura) y Tegueste (Tenerife).
Agradecimientos
Esta monografía está dedicada a la memoria de D. Inocencio Font Tullot, por su descripción tiempo atrás del desplazamiento de otra tormenta tropical de similares características, en el Archipiélago, en concreto, el 21 de septiembre de 1951; un acierto preciso en una época de escasos recursos técnicos. También, a la Dra. Fátima Hernández Martín por sus sugerencias sobre el texto y búsqueda de información de la red meteorológica del Cabildo de Tenerife; a D. Pedro López Batista por la entrega generosa de información meteorológica de su propia estación Davis en Puerto del Rosario y entrega de una galería fotográfica de paisajes majoreros durante el episodio lluvioso; al Dr. Stephan Scholz por la entrega de maravillosas fotografías y datos pluviométricos en dos lugares de medianías; al Dr. Juan Miguel Torres Cabrera, por sus consejos sobre las características de las gavias, entrega de fotografías de una isla sorprendente y datos pluviométricos en la costa; a D. Francisco Barrera González por sus consejos climáticos durante el episodio lluvioso, entrega de fotografías y datos pluviométricos esenciales del Valle de Güímar; a D. Andrés Delgado Izquierdo por su diseño del texto y trazado de mapas de isoyetas; a la Sra. Ana Garrido Martín por la entrega de información meteorológica de las redes de estaciones automáticas AEMET y Cabildo Insular de Lanzarote y de una fotografía del paisaje reverdecido; a D. Gerardo García Casanova por su oportuna foto de la costa de Candelaria y D. Pedro Cabrera, Técnico AEMET del Aeropuerto de Fuerteventura por haber facilitado información meteorológica reciente de su isla y a D. José Miguel Viñas Rubio, www.divulgameteo.es por divulgar el clima majorero.